Christopher Robin, magia pura de Disney
Hubo dudas. Hubo dudas desde el comienzo con la noticia de una película live action de Christopher Robin. Hubo dudas cuando salió la primera imagen de Winnie the Pooh y habrá dudas hasta el día que llegue a las salas. Está claro que es una apuesta arriesgada por parte de Disney pero ya conocemos a esta compañía: cuando se propone algo, lo hace, y lo hace bien.
Una propuesta arriesgada
Protagonizada por Ewan Mcgregor y Haley Atwell llega muy pronto a nuestros cines esta adaptación live action de Winnie the Pooh, en este caso con la historia girando en torno a Christopher Robin pero sin olvidarse de nuestros amigos del bosque.
En una sociedad británica siempre ajetreada y con el trabajo como única preocupación, Christopher Robin ha dejado de lado el espíritu infantil y divertido que tenía de niño. A su familia se le hace difícil ver como va decayendo más y más y tan solo piensa en trabajar. La vida de Christopher parece monótona y rutinaria hasta que un día recibe la visita de un antiguo amigo suyo, un amigo muy especial…
Christopher Robin, magia y personalidad
Magia y personalidad son las cualidades que una vez más vuelven a definir a esta película de Disney. La magia de llevarnos a otro mundo y de conectarlo con recuerdos de la infancia, de que un cuento para niños se convierta en algo más. Personalidad porque no se pierde nada, los personajes, las voces, esa esencia que sigue estando ahí y que viene siempre acompañada de nostalgia. Nos reencontramos no solo con Pooh, sino también con Pighlet, Ígor, Tiger… toda una vuelta a nuestros recuerdos mas felices con Disney.
Disney vuelve a cumplir con Christopher Robin, otro live action bien hecho y que no se limita únicamente a lo visual, si no que cuenta una historia y transmite unos sentimientos, ya no hay dudas.
Dirección: Marc Forster.
Reparto: Ewan McGregor, Hayley Atwell, Mark Gatiss, Adrian Scarborough,Roger Ashton-Griffiths, Paul Chahidi, Gintare Beinoraviciute, Bern Collaco.
Duración: 104 minutos.