Un western que te atrapa como pocos lo hacen
El director Jacques Audiard ofrece un western que, sin alejarse de las convenciones del género, logra sorprender por su ingenio y emotividad. El western me persigue. Nunca ha sido uno de mis géneros favoritos, pero últimamente me veo atrapado entre historias de vaqueros, cazarrecompensas y granjeros con oscuros pasados.
La última gran sorpresa fue Red Dead Redemption II, un videojuego que empezó atrayéndome por su detallado mundo abierto y acabó engatusándome por su arrolladora historia.
Algo similar ha ocurrido con Los Hermanos Sisters, una película cuya existencia desconocía y que, a pesar de no convencerme demasiado por su propuesta, me atrapó a los pocos minutos de empezar.
La historia de Los Hermanos Sisters es una de las más emotivas y humanas que he podido ver en mucho tiempo. El director, Jacques Audiard, presenta como figuras protagonistas a dos hermanos completamente opuestos entre sí. El joven de los hermanos, Charlie, es un vividor alcohólico que disfruta su trabajo de asesino y carga consigo un carisma puntiagudo tan molesto como atractivo. El mayor, Eli, es un hombre tranquilo que aborrece su profesión y sueña con retirarse y vivir tranquilo. Embarcando a ambos en un viaje por los Estados Unidos para encontrar al fugitivo Hermann Kermit Warm, los dos tendrán tiempo para conocerse el uno al otro, y a sí mismos, durante 2 horas en las que logramos conocer a fondo a dos maravillosos personajes.
Extrañando el hogar
Pese a un inicio frenético que apunta a una película de disparos y cazarrecompensas, lo cierto es que Los Hermanos Sisters acaba por tomar un derrotero mucho más intimista y original. Ante todo, la película de Audiard nos habla del hogar.
Charlie y Eli son dos hermanos con vidas lejos de lo sencillo. Los demonios familiares les persiguen allá donde van, por lo que Charlie se refugia en la bebida y Eli trata de imaginar una vida apacible en la que no tener que preocuparse por los monstruos del armario. Envueltos en una profesión tan fría como desoladora, ambos comenzarán a darse cuenta de que necesitan plantearse sus vidas por completo y, en consecuencia, tomar decisiones drásticas para el futuro de ambos.
El guion de la película maneja todos estos aspectos de manera sublime. No solo te muestra la historia de uno de los dúos más entrañables que se hayan visto en los últimos años, sino que también te hace conectar con ellos como pocas películas lo consiguen. Los escritores, el propio Audiard y Thomas Bidegain, ejercen aquí una labor espectacular para conseguir que entendamos todas y cada una de las facetas de nuestros protagonistas. Y lo consiguen con creces.
Un reparto de lujo
Otro de los grandes méritos de Los Hermanos Sisters es que su excelente narrativa se ve reforzada por unas interpretaciones absolutamente perfectas.
La película cuenta en su reparto con actores de la talla de Jake Gyllenhaal, Joaquin Phoenix, Riz Ahmed o John C. Reilly, todos ellos formando un conglomerado de personalidades que chocan entre sí y logran robar minutos de pantalla de forma impresionante. A pesar de esto, es Phoenix quien, sin dudas, se hace con la interpretación más completa de la película. Charlie no sería tan grandioso personaje si no tuviese a un actor tan bueno, y Joaquin Phoenix logra dar la talla.
El sonido del Oeste
Todas las virtudes de Los Hermanos Sisters se ven reforzadas por su excelente apartado técnico. Si bien la fotografía no es especialmente destacable salvo por algunos momentos de lucidez, la banda sonora de la película es una de las mejores piezas que ha traído el género desde Django Desencadenado. Tan sutil como feroz, Alexandre Desplat ofrece temas tan desgarradores como bellos. Algo completamente esperable del hombre que hizo flotar a La Forma del Agua.
En conclusión, Los Hermanos Sisters es una película que quizá pueda no ser del agrado de todo el mundo. Al fin y al cabo, trata temas que uno puede no estar dispuesto a soportar si busca un entretenimiento tan simple como lícito. Sin embargo, para todo aquel que disfrute de ser cautivado por una historia sobre la humanidad, la codicia y el hogar, es la película ideal.