Star Wars: El Ascenso de Skywalker, el fin de una era
Llega la última entrega de la saga de Star Wars, una de las películas más esperadas del año, aquí te traemos una selección de los mejores momentos, evitando todos los spoilers. El ascenso de Skywalker nos sitúa en el futuro inmediato tras la anterior entrega de la trilogía, pero las cosas han cambiado mucho…
Los protagonistas reciben la llamada del antiguo senador Palpatine. Kylo Ren y Rey inician la búsqueda de los artefactos Sith necesarios para encontrar el origen de dicha transmisión. A partir de ahí se desarrolla la historia de la mano de nuestros protagonistas, junto a Leia, Finn, Poe o los clásicos droides C3PO, R2D2, BB8 o el nuevo D-0.
Tiene elementos para todos
Star Wars: El Ascenso de Skywalker, deja contento y descontento a todo fan que la ve, algo que puede verse como un punto negativo, o como algo positivo. El film está repleto de acontecimientos, giros argumentales y apariciones. Dentro de este cúmulo de información y estímulos todo espectador tiene preferencias e inquietudes, por lo que todo el mundo ha acabado satisfecho hasta cierto punto con el final de la saga.
Aunque suene ambiguo, este es un elemento muy potente en la película, J.J. Abrams decide cerrar todas las tramas y compactar todos los elementos sueltos de tal forma que todo quede ensamblado, haciendo quedar satisfechos, al menos en parte, a todos los fans de la saga.
Carrie Fisher como Leia Organa por última vez
Tras trágico fallecimiento de Carrie Fisher, en diciembre de 2016, concretamente un año antes del estreno del episodio VIII: Los Últimos Jedi, un gran reto se vino encima de la compañía. Era necesario el rodaje de la nueva película contando con Leia Organa, ya que en el Episodio VIII no se le da un final a este personaje.
Salvando spoilers, el espectador y fan de la saga puede imaginar que en esta última entrega, deben darle un cierre a Leia, un cierre a la altura de semejante personaje. Este punto se cumple con creces, las aspiraciones de la General Organa son alcanzadas, sus preocupaciones más profundas, su relación con el resto de personajes principales, todo se cierra en a la altura de tan grande personaje y actriz.
Luminosidad y color
Centrándonos en una faceta más técnica, llama la atención la potente fotografía del Ascenso de Skywalker de la mano de Dan Mindel, prácticamente a la altura de Los Últimos Jedi. Existen dos líneas de visuales que se entrelazan en la luz y el color. La primera de ellas es la oposición entre el sable rojo de Ren y el azul de Rey, que vemos enfrentados durante toda la película, transportando al espectador a tiempos de la trilogía inicial o incluso de las precuelas.
El siguiente hilo del que tirar relacionado con los espacios y su connotación. Asignando tonalidades a la inversa que con los sables láser, los planetas desérticos con tonalidades cálidas (rojo) son atribuidos a Rey, ya que su planeta de origen es Jakku. Por el contrario, planetas como Exagol está lleno de oscuridad y tonos fríos, concordando con su connotación en la película.
Se estrecha el vínculo entre Kylo Ren y Rey
Desde el Episodio VII de la saga, hasta el actual Ascenso de Skywalker, la saga transmite al espectador una potente unión en la fuerza entre los dos protagonistas. Esta unión va creciendo durante las dos primeras entregas de la trilogía, hasta la última película, donde se afianza como no ha pasado antes. Una unión en la fuerza nunca vista.
Las escenas dramáticas son más tensas, tanto Kylo Ren como Rey cada vez están más abstraídos… todo esto aporta profundidad y mucha identificación del espectador con los personajes. Ya no hablamos de Jedi o Sith, de bueno o malo, azul o rojo. Ahora tanto el bien y el mal habitan en todos los usuarios sensitivos, como pasa con las personas de a pie. Esta entrega bebe mucho de todos los protagonistas, más concretamente de ellos dos.
Se cierra el arco de Kylo Ren
Adam Driver nos tiene acostumbrados a una serie de actuaciones envidiables, y en Star Wars no decepciona. Posiblemente el arco argumental de Ren sea de los más interesantes de la trilogía, un joven usuario del Lado Oscuro sumido en batalla consigo mismo y arrastrando un pasado que le atormenta. Descrito así puede recordarnos a Darth Vader, pero, aunque Ren busque asemejarse, el espectador sabe que no son iguales y no lo pueden ser.
En esta entrega, El Ascenso de Skywalker, Kylo Ren resuelve los traumas de su pasado con sus familiares y con Rey, por fin uno tiende su mano al otro de forma completa, no como en las anteriores películas. El protagonista masculino sufrirá un antes y un después que hará que no vuelva a ser el mismo. Un cierre argumental digno de un personaje tan complejo.