The Head ya disponible al completo en Orange TV
Aquí estoy una semana más, en este caso la última por desgracia, para daros mi opinión sobre una de las series revelación del año: The Head. Serie original de Mediapro creada por los hermanos Pastor (Hogar) y dirigida por Jorge Dorado (El Ministerio del Tiempo). En este caso vengo a hablaros de los últimos dos episodios de esta ¿primera temporada? que ya he podido ver al completo.
En sí, han sido dos capítulos cargados de tensión e incertidumbre y que han servido básicamente para encajar todas las piezas y que sepamos quién había sido el culpable de todo lo que estaba pasando en la Polaris V. ¿Tenemos todas las respuestas? Sí, por supuesto. Y aparte de todo eso, nos encontramos con un cliffhanger final que yo en cierta manera me esperaba pero que aún así, me sorprendió bastante. Ahora sí, hablemos más a fondo del final de The Head.
Un final que encaja las piezas a la perfección
Bien. Pues en estos dos últimos episodios podemos encontrarnos las piezas del puzzle totalmente predispuestas para que vayan encajando poco a poco y es así como nosotros mismos vamos hallando todas las respuestas que nuestra mente necesitaba encontrar. No te dan nada mascado y como dije desde un primer momento, esta serie nos hace partícipe del misterio desde el minuto uno. Casi como una historia de Agatha Christie ubicada en la Antártida.
De hecho, el guion está tan bien ideado y orquestado de manera tan inteligente que el final presentado encaja todas las piezas a la perfección sin dejar nada a la imaginación. Nos muestran a los asesinos, la razón de lo que han hecho y nos presentan unas motivaciones muy convincentes que de manera global, uno mismo se siente muy satisfecho con lo que ha visto. La verdad es que es un lujo descubrir series así. Series que te explotan la cabeza a la vez que te hacen pensar y participar en una historia oscura que lo sigue siendo hasta el final.
Quizás el símil está en la propia Antártida, donde algunas noches son tan largas. Porque al final, la verdadera oscuridad de la noche son las que guardamos en nuestro interior y que muestra su verdadera cara a la hora de afrontar los problemas. Creo que el páramo helado y el peligro no era el propio lugar, si no los propios integrantes de la expedición. Su locura interna, la locura que todos tenemos dentro se muestra en el final de manera extrema y dejándote con la sensación de que el mal ha ganado. No digo que sea algo malo, al contrario, empareja totalmente con la historia contada en un principio.
¿Habrá segunda temporada?
En cuanto a la pregunta de su supuesta continuación, pues no soy nadie para determinarlo. ¿Me gustaría que siguiera? En parte sí y en parte no. Creo que el producto mostrado ha sido tan bueno como una miniserie si se le quiere llamar así, que estirar el chicle demasiado podría llevar a la serie a un bucle de historias que terminarían desmejorando el material original. Pero por otra parte, productos así tan buenos, siempre es un lujo tenerlos en la parrilla. Aunque solo los responsables sabrán la respuesta definitiva.
En líneas generales, The Head nos ha presentado una propuesta interesante desde el capítulo uno que ha llegado a su fin en sus increíbles dos episodios finales. El trabajo de los hermanos Pastor al frente del guion ha sido estudiado hoja a hoja y a la hora de plasmar eso a la pantalla, creo que no había nadie mejor que Jorge Dorado para meterse al frente del proyecto.
Han sido seis capítulos excepcionales de principio a fin que nos dejan con un cliffhanger final que ya se dirá en un futuro si llegará a resolverse o no en una posible segunda temporada. Y ahora que está completa bajo demanda, The Head debería ser la serie del verano para ti.
Todos los episodios de la primera temporada de The Head, están ya disponibles bajo demanda a través de Orange TV.
Director: Jorge Dorado.
Creada por: Álex Pastor, David Pastor.
Reparto: Álvaro Morte, Tomohisa Yamashita, Laura Bach, Alexandre Willaume, Amelia Hoy, Hannes Fohlin, John Lynch, Katharine O’Donnelly.
Género: Thriller. Supervivencia.
Duración: 50 minutos.