Nuestra selección de las mejores películas románticas….¡ah no, espera, ANTI-ROMÁNTICAS!
Cuántas veces hemos visto una película catalogada como romántica o cuya trama principal se nos ha vendido como una auténtica historia de amor y al terminar de verla nos hemos preguntado: ¿Dónde narices está el romance? ¿En qué momento a alguien se le ocurrió incluir esta cinta en el género romántico?
Aunque no lo creáis esto ocurre más de lo que pensamos, y por eso el #TeamMoobys ha decidido investigar y ahondar más en aquellas historias que nos vendían amor eterno, y que a la hora de la verdad su trasfondo es otro bien distinto.
1. La La Land
Que sí. Que la banda sonora es una pasada, que las coreografías son maravillosas, que la ciudad de Los Ángeles es mágica, que Ryan Gosling es el yerno perfecto, que Emma Stone tiene una belleza poco convencional y que la química entre ambos es arrolladora, pero que no nos vendan que La La Land es un drama romántico. Nos negamos a admitir que esta película sea ante todo una historia de amor porque sintiéndolo mucho el mensaje que quiere trasmitir es todo lo contrario. Lo último de Damien Chazelle, habla de los sueños y de cómo en muchas ocasiones el amor nos puede frenar o ser una barrera para llegar a ellos.
2. Begin Again
Si todavía no has visto esta entrañable historia del director de Once o Sing Street, debes saber de antemano que a pesar de ser descrita en numerosas ocasiones como un romance musical, nada más lejos de la realidad. Musical sí, de hecho la música es la base de toda la película, pero de romance hay más bien poco. Begin Again nos cuenta una historia sobre las fallidas segundas oportunidades y de cómo mirar al futuro sin quedarse atrapado en el pasado.
3. Lars y una chica de verdad
Lars y una chica de verdad, nos plantea la siguiente cuestión: ¿puede alguien querer a una muñeca de plástico como si fuera una persona real? La historia es divertida, tierna e incita a la reflexión pero nunca podríamos denominarla «película romántica» como muchos lo hicieron cuando se estrenó. Más bien se centra en una historia sobre la timidez, la soledad y todas sus consecuencias.
4. 500 días juntos
«Esto es una historia de chico conoce a chica. Pero más vale que sepas de entrada que no es una historia de amor.» Una película que comienza de tal manera, no puede dejar más claro desde su inicio cuál es su verdadera intención. 500 días juntos no es una historia de amor como bien subrayan al principio de la película, sino de las expectativas que en muchas ocasiones depositamos en otras personas intentando trasformarlas en alguien que no son en realidad.
5. Mi vida sin mí
Mi vida sin mí es una película de visionado obligatorio, pero que no te engañen con su etiqueta de drama romántico. Aunque la historia en ocasiones contenga ingredientes de ese género cinematográfico, la finalidad de la película va mucho más allá. A través de la vida de Ann, la cinta de Isabel Coixet nos habla sobre la brevedad de la vida y de cómo afrontarla cuando sabes su fecha de caducidad.
