Bibi es una joven y prometedora piloto de coches de carreras. Gigi, un atractivo hombre de éxito que se dedica a la venta de coches. Al menos eso es lo que le cuenta a Bibi. En El Fiel, la nueva película del director belga Michaël R. Roskam, Bibi y Gigi inician una relación llena de amor, pero también llena de engaños y secretos, llevándolos a ambos a situaciones límite.
El Fiel es una película que tantea con el género de la acción, del thriller y con el cine de atracos, combinándolo con una sustanciosa trama de amor y romance entre los protagonistas. Interpretados por Adèle Exarchopoulos y Matthias Schoenaerts, Bibi y Gigi rebosan química en pantalla. El resto del reparto también cumple, pero es la pareja protagonista la que se lleva una mayor importancia tanto en el peso de la historia como en el metraje total de la película. Los altos valores de producción de El Fiel se notan enormemente y se agradecen, denotando una gran calidad en la fotografía, las localizaciones y escenarios y en la música compuesta por Raf Keunen para la ocasión.
El problema de El Fiel es que ese tanteo que tiene con distintos géneros no le sale bien, aunque contaba con el potencial para lograrlo. El equilibrio entre la parte romántica y la de acción no está bien medido, y si bien la primera mitad de la película está construida con mimo y acierto, en la segunda parte y el final el guion se resbala, estirando demasiado el chicle y rizando el rizo, contando con que el espectador siga siendo «fiel» a El Fiel. Pero a estas alturas es probable que ya hayamos desconectado, o al menos que nuestro interés haya bajado mucho. De nuevo, la excesiva duración de la película juega una mala pasada al producto final, que aspira a algo a lo que no llega nunca.
La película se estructura en dos partes más un prólogo y un epílogo. La primera se titula Gigi y la segunda Bibi. Sin embargo se trata de una decisión que no tienen consecuencias narrativas en El Fiel, pues la focalización se centra en ambos personajes de manera indiferente durante toda la película, siendo el personaje de Bibi la mayor víctima de la estructura elegida. Se trata de un personaje al que me hubiera gustado conocer más en detrimento de Gigi, que se desarrolla mucho más. Bibi tiene en la segunda parte una oportunidad para brillar que acaba siendo desaprovechada, y como ocurre con la película en general se trata de una buena idea sobre el papel, que en su ejecución final empieza bien, pero acaba desinflándose a medida que pasan los minutos del metraje.
Dirección: Michaël R. Roskam
Reparto: Matthias Schoenaerts, Adèle Exarchopoulos, Sam Louwyck, Stefaan Degand…
Estreno: 24 de Noviembre









