El insulto se estrena en España el 8 de febrero
A veces tan sólo es necesario una pequeña chispa para hacer saltar un problema mucho más grande. Un pequeño detalle puede desembocar en algo completamente inesperado. Y de eso precisamente nos habla El insulto.
Un pequeño y estúpido malentendido entre Toni, cristiano libanés, y Yasser, palestino y capataz de obra, estalla de la forma más inesperada, convirtiéndose en un grave problema que acaba en juicio. Comienza de esta forma un largo conflicto que de forma inesperada tomará una dimensión mundial, mostrando el grave problema que existe entre palestinos y libaneses.
Todo comienza con Toni regando las plantas de su balcón. Yasser pasa por debajo y un poco de agua se derrama sobre su cabeza. Y no hace falta más. El orgullo lleva a ambos a ser incapaces de disculparse, uno por mojarlo, el otro por insultarlo.
La película de Ziad Doueiri nos muestra cómo una pequeña trifulca de barrio puede ser la chispa que encienda de nuevo el terrible problema existente entre palestinos y cristianos, uno que no se soluciona con el tiempo ni tampoco dejándolo correr.
Los dos protagonistas bordan sus papeles, haciendo que el espectador con el tiempo se vea capaz de ponerse en el lugar de ambos, incapaz de posicionarse y decidir quién de los dos lleva la razón. Porque lo cierto es que la tienen los dos y al mismo tiempo no la tiene ninguno.
La película narra con soltura todo el problema, así como las circunstancias que rodean a ambos protagonistas, tanto sus trabajos como su ambiente familiar, y también el estrés que acaba suponiendo un proceso de esta índole en ambos, el desgaste de ellos mismos y de los que están alrededor.
El espectador ve cómo el problema va creciendo y creciendo, hasta que llega a un punto en el que ni siquiera los protagonistas quieren seguir con la disputa por el desgaste que ésta está produciendo en ellos, llegando a entender que ninguno de los dos va a ganar nada con el veredicto.
Mención aparte se merecen también los abogados de ambas partes, que resultan estar relacionados y no pueden evitar convertir esta disputa en algo personal.
En conclusión, la película narra con maestría todo el proceso, así como las repercusiones y consecuencias que tiene toda la situación en la comunidad, mostrando la difícil situación que se vive entre palestinos y libaneses, que se han visto obligados a convivir pero que aún tienen muchísimas diferencias que les impiden hacerlo. Una película muy recomendable y extrapolable a todo tipo de situaciones.
Director: Ziad Doueiri
Reparto: Kamel El Basha, Adel Karam, Christine Choueiri, Camille Salameh…
