La nueva película del director español Alberto Morais cuenta la historia de Miguel (Javier Mendo), un chico de 14 años que se ve obligado a buscarse la vida en todos los sentidos. Su madre (Laia Marull), no tiene trabajo pero sí una vida muy inestable y no puede hacerse cargo de él. Es Miguel el que se encarga de hacer las tareas de la casa, ir al instituto y después vender pañuelos en un semáforo para tener algo de dinero. Mientras tanto los Servicios Sociales quieren internarlo de nuevo en un centro de acogida. Para evitarlo Miguel se va a otro pueblo, a casa de una antigua pareja de su madre (Ovidiu Crisan). Pero allí las cosas tampoco serán fáciles.
La película se convierte en una huida constante. Miguel no quiere volver al centro de acogida porque ya estuvo viviendo un año allí y sabe cómo es. Los primeros planos, la cámara acompañándolo en cada paso que da hace que sintonices y empatices rápidamente con el protagonista. Las interpretaciones de todo el reparto son muy correctas y creíbles, pero destaca especialmente la de Javier Mendo. Te metes tanto en la película que sientes la urgencia y la tensión de la huida que está viviendo. Agradeces la atención de las personas que se preocupan por él y coges cierta manía a los que se lo ponen difícil.
Aunque se trata de un drama social, a los que estamos acostumbrados en nuestro cine, no entra en dramatismos ni situaciones lacrimógenas. Cuenta la realidad tal cual es, pero no se ensaña en ella, lo cual es de agradecer. Aunque algunos momentos en la parte central de la película se convierten en repetitivos y tienes la sensación de que la película no avanza hacia ningún sitio, está muy bien resuelto con un final más que notable.
Director: Alberto Morais.
Reparto: Javier Mendo, Laia Marull, Ovidiu Crisan, Nieve de Medina, Alexandru Stanciu.
Fecha de estreno: 28 de Octubre.