La serie de Netflix continúa haciéndolo bien
¡Cuidado, SPOILERS!
La tercera temporada de Sex Education llegaba a nuestras pequeñas pantallas el pasado 17 de septiembre. De nuevo, a través de sus ocho episodios, hemos continuado viendo la vida de los adolescentes de Moordale y sus familias.
Como en el resto de temporadas, la tercera de ellas está encabezada por Asa Butterfield (Otis) y Emma Mackey (Maeve) y, como es habitual, están acompañados por Ncuti Gatwa (Eric), Connor Swindells (Adam), Gillian Anderson (Jean), Aimee Lou Wood (Aimee), Kedar Williams-Stirling (Jackson), Tanya Reynolds (Lily), Patricia Allison (Ola), Mikael Persbrandt (Jakob) y Alistair Petrie (Michael Groff), entre otros muchos. Además, en estos nuevos episodios todos ellos adquieren una mayor relevancia y, personajes como el de Ruby (Mimi Keene) o el de Vivienne (Chinenye Ezeudu), logran salir del cascarón y adoptar un papel importante en la historia.
Por si fuera poco, a este elenco tan amplio se incorporan Dua Saleh, Jemima Kirke y Jason Isaacs (sí, el señor Malfoy en la saga de Harry Potter), quienes, sobre todo las dos primeras, aportarán un gran juego a la trama.
Sex Education. Unos vienen y otros van
Los nuevos episodios han traído consigo una enorme cantidad de subtramas y problemas que experimentan cada uno de los personajes de la serie. Partiendo de la base de que Sex Education es una serie muy necesaria en la actualidad y que aborda temas de una gran relevancia (sexo, amistad, autoconocimiento, valores, amor, etc.), estas situaciones han logrado estar a la altura de sus expectativas.
Por un lado tenemos la relación de Otis y Ruby, un personaje que va evolucionando a lo largo de los capítulos, gozando ahora de complejidad y enterrando el estado plano en el que se encontraba en un principio. Pese a que la relación resulta cómica y diferente en un comienzo, Otis sigue sin haber olvidado a Maeve, quien, pese a haber comenzado una relación con Isaac, tampoco consigue sacar de su cabeza a Otis. Esto da lugar a uno de los mejores momentos de la temporada (y de la serie): ¡el esperadísimo beso!
Aun así, cuando ambos pensaban que al fin iban a poder disfrutar de una relación normal, Maeve toma la decisión de irse a estudiar a Estados Unidos, cerrando así la temporada. ¿Querrán intentarlo cuando regrese a Moordale?
Otra de las icónicas parejas de Sex Education es la formada por Ola y Lily, quienes, pese a que son muy diferentes (algo que les pasará factura), consiguen superar cada altibajo. Individualmente, cada una de ellas tiene que lidiar con sus propios problemas. Por un lado está Ola, quien tiene que adaptarse a su nueva vida y quien teme que su padre termine eligiendo a su nueva familia antes que ella. Mientras, la autoestima de Lily pende de un hilo, aunque tras mucho dolor, termina dándose cuenta de que no hay nada más bonito y único como ser uno mismo.
Abrazando el amor propio
Siguiendo con las subtramas, nos encontramos con Adam y Eric. Al igual que el resto, cada uno tiene un gran peso a sus espaldas, sobre todo Adam, quien está comenzando a aceptar su sexualidad y a trabajar en sí mismo, convirtiéndose así en uno de los personajes que más evoluciona en esta tercera temporada. Por otra parte, el viaje de Eric a Nigeria supone un antes y un después en su vida y en su relación, además de un momento en el que experimentar un gran crecimiento personal y en el que poder explorar sin remordimientos su libertad y su identidad, lo que pondrá un punto y final en su relación con Adam.
Otra adolescente que va a tener que lidiar con un gran problema es Aimee, quien fue asaltada sexualmente en la segunda temporada y quien, con la ayuda de Jane, poco a poco va superando el trauma que le acompaña.
Siguiendo con Jane, su historia es una de las más impactantes en esta nueva tanda de episodios de Sex Education. Tras confesar a Jakob que está embarazada, ambos deciden darse una nueva oportunidad. Jane se pone de parto antes de tiempo y termina perdiendo mucha sangre, lo que hace que su vida se encuentre entre la espada y la pared. Finalmente logra salir adelante y, mientras está ingresada en el hospital, recibe una carta con el resultado del test de paternidad que Jakob le había pedido, dejando a una Jane boquiabierta y a unos espectadores deseosos por conocer el interior del sobre.
Rompiendo barreras
Con la llegada del nuevo reparto y la importancia que se ha concedido a personajes ya existentes, la serie ha incluido situaciones muy variopintas. La aparición de Cal, por ejemplo, ha supuesto la introducción del término queer, algo que ha hecho que la serie de Netflix continúe sumando puntos positivos por su clara diversidad en todos los sentidos.
Sin duda, Sex Education se ha convertido en una de las series favoritas de los adolescentes, y no nos extraña. Con su magnífica variedad de géneros, apariencias y personalidades, y su tratamiento de la sexualidad como algo tan natural, ha hecho que los jóvenes puedan sentirse identificado con algunos de los personajes y puedan utilizar la serie como método de aprendizaje debido al frágil y pudoroso sistema educativo en el que vivimos.
Sex Education ya ha sido confirmada para una cuarta temporada que esperamos resuelva todas las incógnitas que han dejado estos nuevos episodios. ¿Qué pasará con Maeve y Otis?, ¿surgirá algo entre Adam y Rahim?, ¿será Jakob el padre de Joy?
¡Tendremos que esperar para averiguarlo todo!
