Da gusto sorprenderse con una película en festivales. Con un título como Tratamos demasiado bien a las mujeres, sin conocer la novela en la que se basa y con Carmen Machi a la cabeza me podría esperar casi cualquier cosa en el Festival de Málaga, pero pensaba que, cuanto menos, estaría ante un drama bastante intenso. Después de ver el cartel ya no tenía muy claro ese tono. Parecía una historia de guerra civil, con una mujer protagonista en traje de novia rifle en mano… ¿que clase de película íbamos a ver? Pues una de las gratas sorpresas de este festival y una película totalmente inclasificable.
Bocas, Doce y resto de su unidad son unos maquis que están desesperados y perdidos, literal y figuradamente, por los montes españoles. Buscando comida y orientación hacia Francia terminan en un pueblo perdido de la mano de Dios y toman a la fuerza la estafeta de correos local. Allí rápidamente se verán asediados por las fuerzas franquistas pero sin saberlo se habrán quedado encerrados con la persona mas peligra del pueblo: Remedios Buendía.
Humor negro y un gran reparto
Hay muy pocos directores españoles que puedan tener una ópera prima al nivel de reparto y calidad como Clara Bilbao. Nombres como Carmen Machi o Antonio de la Torre ya son reclamos suficientes para el público y todo un sello de calidad. Pero si además de eso le añadimos unos valores de producción espectaculares y una historia arriesgada e interesante, Tratamos demasiado bien a las mujeres se convierte en un proyecto espectacular.
La película comienza estableciendo un tono tragicómico con un ácido humor negro. Toda las dinámicas se establecen gracias a las tramas personales de los personajes. Los maquis son un grupo de perdedores bastante entrañables, con unas características muy marcadas en cada uno y que cada actor sabe llevar perfectamente a su terreno, como el estilo de Julián Villagrán o la sorprendente dureza de Ayax Pedrosa. Como contrapunto, el personaje de Carmen Machi es algo absolutamente villanesco, cuyos elementos se exageran casi hasta la parodia a medida que avanza la historia, cosa que no es necesariamente mala.
Esto es debido a que toda la historia cambia desde una historia cómica ambientada en la guerra civil (que me hizo recordar a los primeros compases de La Vaquilla y las discusiones sobre el tabaco) a una parodia autoconsciente, que incluso puede permitirse algún elemento sobrenatural paro que sabe llevarte de la mano en ese viaje para que no se te haga demasiado abrupto. A medida que los minutos pasan y el reparto va menguando en pantalla, la película sabe mantener el interés ofreciendo un par de giros de guion curiosos.
Tratamos demasiado bien a las mujeres es de esas películas que la gente no va a saber clasificar bien pero que es innegablemente divertida, capaz de hacerte reír pero también de sorprender, con una producción muy cuidada y una historia que te atrapa.
Dirección: Clara Bilbao / Guion: Miguel Barros / Novela: Raymond Queneau / Reparto: Carmen Machi, Antonio de la Torre, Julián Villagrán, Isak Férriz, Diego Anido, Óscar Ladoire, Ayax Pedrosa, Oleg Kricunoff, Felipe Pirazán, Nicolas Grandhomme / Duración: 93 minutos.