Renée Zellweger se mete en el papel de Judy Garland
Rupert Goold nos trae su segundo largometraje. La anterior película que realizó fue junto a James Franco, Jonah Hill y Felicity Jones, Una historia real (2015), fue una historia basada en un hecho real entre el periodista del New York Times y un presunto asesino que le había robado la identidad. En esta oportunidad Goold vuelve a contarnos una historia real, concretamente una película biográfica sobre Judy Garland.
La cinta se basa en la vivencias de Judy Garland 30 años después de estrenar El mago de Oz (1939). La actriz y cantante visita Londres para dar numerosos conciertos, pero lamentablemente su carrera no es la de antes. Tiene dos hijos (Lorna y Joey) y está separada de su tercer marido, Sidney Luft, y apenas tiene trabajo por lo que acepta muy a su pesar dejar a sus hijos con su ex-marido viajando a Londres para realizar unas funciones en Talk of the Town, un salón de espectáculos.
Judy Garland con 47 años lo único que busca es una estabilidad laboral, trabajar para reunir dinero y tener una casa junto a su familia. Eso no le será nada fácil, ya que se encuentra sola y luchando contra esos fantasmas que la asedian cada noche y no la dejan dormir. La actriz saltó a la fama a una edad muy temprana y no paró de trabajar, pero apenas podía comer y se alimentaba únicamente de pastillas, todo esto le provocó graves problemas de adicción con varios medicamentos y con el alcohol.
Un papel difícil de olvidar
Judy es una historia conmovedora, un relato de todos las adversidades a las que se enfrentaba esta popular actriz y cantante. Una niña que creció bajos los focos, delante de las cámaras, que se dejó la piel en su trabajo. Garland no pudo disfrutar de la infancia como otras niñas, su cometido era únicamente trabajar, hacerlo bien y seguir siendo la recordada niña de El mago de Oz.
El guion de Tom Edge está basado en la obra musical de Peter Quilter, que tuvo un gran éxito y se ha representado en Nueva York, Edimburgo, Sidney, Londres, etc, llamada Al final del arcoíris, es sin duda brillante. Muestran al espectador de una manera sencilla, parte de la vida de Judy Garland, sin florituras ni excesos, centrándose en su luchar por cambiar y mostrando lo mucho que le importaban sus hijos. Lamentablemente muchas personas la tildaron de mala madre, pero era una mujer rota por dentro, con graves problemas que nunca supo mermar.
El director sabe mostrar al público lo que quiere, nos sitúa frente a la artista y nos adentra en su fatídica historia. Puedo afirmar a día de hoy que la mejor opción fue sin lugar a duda la elección de Renée Zellweger. La actriz americana calcula a la perfección la fuerza y debilidad de Judy Garland, potenciando así su actuación. Ha estudiado cada movimiento y postura de aquella estrella que se iba apagando en los años 70.
A pesar de tener dentro del reparto a muchos rostros conocidos, únicamente podemos centrar nuestra mirada en la protagonista, Renée Zellweger que ha hecho la mejor actuación de su carrera, hasta la fecha al menos.
Judy, detrás de las cámaras…
Una cinta apasionada, con muchos saltos en la vida de esta gran actriz y cantante como fue Judy Garland. Una película potente llena de música, grandes actuaciones, que te hará vibrar en el asiento y al mismo tiempo enternecedora, dramática y con una gran fuerza.
En resumen, Judy es un retrato biográfico sútil, cuidado, que no cae en la frivolidad. Todo esto acompañado de actuaciones sólidas y con un gran mensaje, luchar por uno mismo, ser valientes y que no decidan por nosotros.
Ir a verla, la actuación de Renée Zellweger es deslumbrante y recuerda que: “Como en casa no se está en ningún sitio.”
Director: Rupert Goold.
Reparto: Renée Zellweger, Rufus Sewell, Finn Wittrock, Michael Gambon, Jessie Buckley, Bella Ramsey, John Dagleish, Gemma Leah Devereux, Gaia Weiss, Andy Nyman, etc.
Género: Drama. Biopic.
Duración: 118 minutos.
Fecha de estreno: 31 de enero de 2020.