Feliz 53 cumpleaños, doctor. Bienvenido al primer día de su muerte.
Pertenezco a algún momento de su pasado. Usted arruinó mi vida. Quizá no sepa cómo, por qué o cuándo, pero lo hizo. Llenó todos mis instantes de desastre y tristeza. Arruinó mi vida. Y ahora estoy decidido a arruinar la suya.
Frederick Starks es un psicoanalista como cualquier otro. Se pasa los días escuchando a...