Una proyección de la historia jamás contada del primer ministro británico durante la Segunda Guerra Mundial, Churchill nos relata las horas previas al día D y el desembarco de Normandía desde la visión de Winston Churchill.
Winston Churchill (Brian Cox) al conocer el plan que organiza su ejército británico en torno al Día D, se percata del gran número de hombres que pueden morir mientras se lleva a cabo el plan en cuestión, que se trata nada más y nada menos que de realizar un desembarco en Normandía para realizar una ofensiva y volver a tomar París. Churchill se siente responsable de la inminente carnicería que sucederá en Normandía, queriendo formar parte de las operaciones militares y decidir sobre ellas. Por ello, decide enfrentarse a los altos mandos del ejército con el fin de que se anule el plan para crear una nueva estrategia que salvará la vida de muchos de los soldados británicos.
Winston, deberías saber que: «quien mucho abarca poco aprieta»
Y es que, más bien, el papel de Winston Churchill en esta película es una sucesión de intentos para convencer a los altos mandos del ejército de que no realicen su descabellado plan para tomar Francia. Intentos que resultan ser fallidos una y otra vez. Esto se debe a que los generales británicos le reprochan que se dedique exclusivamente a su labor política y no interceda en las decisiones del ejército en el transcurso de la guerra. De ahí lo de: “quien mucho abarca poco aprieta” dirigido al bueno de Churchill.
El director Jonathan Teplitzky se embarca, o más bien se desembarca, en este nuevo filme biográfico tras Un largo viaje, que recibió críticas no muy positivas, dejando entrever carencias narrativas en el guion realizado por Alex von Tunzelmann. Y es que el guion de Churchill deja un sabor agridulce. Los discursos y monólogos que Winston Churchill pronuncia son dignos de mención, siendo épicos, decididos y memorables.
Por otro lado, la película es un constante choque de posturas entre el primer ministro británico y el ejército. Esto hace que, escena tras escena, los diálogos se asemejen bastante, produciendo una sensación algo repetitiva y de lentitud en el desarrollo de la trama.
A pesar de todo esto, Churchill tiene apartados notables, sobre todo si nos fijamos en lo técnico. La forma en la que está recreada la Inglaterra de los años 40 es digna de mención, tanto la ambientación como el vestuario de los personajes son fieles a la época en la que suceden los hechos. La fotografía de la película despunta como un apartado sobresaliente, ofreciéndonos entornos iluminados de manera magistral y presentados a través de unos planos muy visuales y que realmente transmiten lo que quiere expresar el director. Brian Cox a pesar de que, por órdenes del director, se le hiciese interpretar a Churchill como un señor arrogante y tedioso, realiza un trabajo brillante y sólido, a la altura de la persona a la que daba vida, nada más y nada menos que a Winston Churchill.
El filme histórico de Jonathan Teplitzky nos presenta a un Churchill desatado por la salvación de sus hombres que, a pesar de tener errores en alguno de sus apartados narrativos, no te puedes perder.
Director: Jonathan Teplitzky.
Reparto: Brian Cox, Miranda Richardson, John Slattery, James Purefoy, Julian Wadham, Richard Durden, etc.
Estreno en España: 8 de septiembre de 2017.