Saint Judy llega en el momento preciso
Judy Woods (Michelle Monaghan) deja su trabajo como abogada para mudarse a Los Ángeles, a causa de la custodia de su hijo. Esto no sólo supone un cambio de lugar, sino un giro completo en su oficio. De ser una absoluta eminencia en lo penal, pasa a pelear con uñas y dientes en el oscuro mundo de los casos de inmigración. Pero ella sabe que su arma principal es la que siempre ha usado: Solo la verdad.
Este drama biográfico se estrena en España el 31 de mayo en diversas plataformas (VOD de Movistar+, Vodafone TV, iTunes, Google Play, Rakuten TV y Filmin). La historia real de Judy Woods y el caso de Asefa Ashwari que supuso un cambio en la legislación americana sobre asilo a mujeres no podría llegar en un clima político más adecuado. Y es que la baza principal de Solo la verdad es el poderoso mensaje que transmite en un momento crítico de la sociedad, tanto americana como mundial.
La justicia al servicio de la gente
Si Asafa es enviada de vuelta a Afganistán, será asesinada por sus ideas feministas, incompatibles con el régimen talibán.
A Judy Woods la han apodado Saint Judy por su tenaz defensa basada en la persona sobre la fría legalidad escrita. Y este es el sistema que trata de emplear en su nuevo trabajo en los casos de inmigración ilegal. El caso de Asafa Ashwari (Leem Lubany) es de los más complicados, así que empieza por él. Cuando la despiden por indagar más de la cuenta, Judy no se rinde y decide formar su propio bufete.
Allí lleva cientos de casos de personas inmigrantes, pero el de Asafa es el que más le ocupa la mente. Si la maestra es enviada de vuelta a Afganistán, será asesinada por sus ideas feministas, incompatibles con el régimen talibán. Saint Judy se vuelca en cuerpo y alma para conseguir que se le conceda el asilo político, aunque eso suponga descuidar su entorno y sus ingresos, competir contra compañeros e incluso desafiar al sistema y las leyes establecidas.
Mensaje a través de los roles
Solo la verdad destaca por su historia, y ésta se cuenta a través de los personajes. La película está plagada de discursos grandilocuentes y de roles que podrían catalogarse como estereotipos demasiado sencillos. Debido a esto puede que a veces caiga en la simpleza, pero no se puede negar que los secundarios con un rol marcado ayudan a reforzar el mensaje. Ray (Alfred Molina) , Benjamin (Common), Omar (Waleed Zuaiter) o la juez Benton (Alfre Woodard) son algunos ejemplos que representan modos diferentes de ver la realidad y de actuar frente a ella.
Saint Judy ha sido distinguida como “Especialmente recomendada para el fomento de la igualdad de género”.
El resultado es una película de corte absolutamente reivindicativo. No parece en absoluto casualidad que llegue en este momento. Saint Judy ha sido distinguida como “Especialmente recomendada para el fomento de la igualdad de género”, pero este no es el único campo que toca. En medio de la tormenta política en Estados Unidos, es imposible dejar de ver la relevancia del tema de la inmigración en Solo la verdad. Lo que está claro es que la interpretación de la abogada por parte de Michelle Monaghan será un activo para ambas causas.
En resumen, la fuerza de Solo la verdad: Saint Judy reside en la historia en la interpretación de la protagonista con el apoyo de los secundarios. No es sorpresiva ni emocionante, pero sí muy actual y reivindicativa; y es muy posible (y deseable) que consiga remover unas cuantas conciencias.
Dirección: Sean Hanish.
Reparto: Michelle Monaghan, Leem Lubany, Common, Alfred Molina, Alfre Woodard, Ben Schetzer, Waleed Zuaiter, Gabriel Bateman, Peter Krause, Mykelti Williamson.
Duración: 106 minutos.
Estreno: 31 de Mayo (plataformas).