50 años celebrando la cultura y las artes
Un año más la San Diego Comic Con llama a nuestras puertas. Esta vez, celebra su 50 aniversario como una de las convenciones de cómic más antiguas del mundo. Aunque, como ya sabemos, ha sido poco a poco fagocitada por la industria del cine y de la televisión, en el fondo sigue fiel a sus costumbres. En Moobys, tenemos el inmenso placer de poder acudir a esta cita por cuarto año y disfrutar de la que para nosotros es LA CONVENCIÓN.
Recién aterrizados después de un viaje de más de 12 horas, pero con la energía del primer día, nos dirigimos al Centro de Convenciones de San Diego. Hace apenas una semana se confirmaba la noticia de que este lugar seguiría siendo la sede de la Comic-Con International por al menos 4 años más. A pesar de que el lugar es un emplazamiento de lujo para este evento, bien es cierto que desde hace unos años la convención se extiende por gran parte del centro histórico de San Diego, ofreciendo gran cantidad de entretenimiento para asistentes y turistas.
Como toma de contacto, entramos en el pabellón donde se encuentran los stands, el gran mercado y muestrario de novedades de la SDCC. Allí tienen cita con los fans desde grandes marcas como Funko o Mattel hasta pequeños comerciantes de comics o autores. La mayor parte del espacio lo ocupan los grandes nombre como Marvel, Nickelodeon o WETA Workshop y realizan constantes demostraciones de sus novedades o sorteos, haciendo el andar por ciertas partes una tarea complicada. Pero eso no nos impidió dar el paseo de rigor por todas las tiendas habituales.
Toma de contacto con los paneles de la SDCC 2019
Después nos dirigimos camino al Hilton San Diego, para probar suerte con los paneles. Quizás debido a que se trataba del primer día de la SDCC 2019 pudimos entrar sin problemas y hacernos la boca agua con la presentación de la 4 temporada de Van Hellsing. La serie, que podéis disfrutar en Netflix, tiene una gran cantidad de fans que pudieron ver un avance en exclusiva de la temporada además de varios vídeos recopilatorios, contando con la presencia de su protagonista, aunque fuese vía skype ya que se encuentra embarazada de nueve meses.
A la salida, el canto de sirena del Hall H nos llamó. En ese colosal salón se hacen las mayores presentaciones de la convención. Por suerte, y a pesar de su leyenda negra de terminar con la paciencia y energías de los fans que esperan por entrar, accedimos sorprendentemente rápido.
Netflix, HBO y Marvel
Marvel ha hecho acto de presencia este año en todos los formatos posibles y en el primer panel del Hall H presentó sus novedades en videojuegos. Además de una colaboración con Team Liquid y el Iron Man VR, lo más esperado era el anuncio de Avengers para PS4. Pusimos disfrutar de más minutos que en el E3, pero las sensaciones fueron un poco las mismas. Mucho QTE, mucha promesa de RPG y personalización, pero sigue pareciendo un juego un poco desfasado a su tiempo o aún a medio cocer.
Después de los videojuegos hizo acto de aparición Jeph Loeb, el responsable creativo de todo Marvel Television, para dar paso al panel de Marvel Agents of SHIELD. Clark Gregg, Ming-Na Wen y el resto de los agentes animaron a un público entregadisimo. Durante el panel, además de despejar dudas de los fans y calmar a los que lloraban por el agente Coulson, fueron poniendo pequeños clips recopilatorios de todas y cada una de las temporadas, para culminar con el trailer de lo que nos espera en esta séptima temporada.
Para culminar un día quizás demasiado largo para nosotros, pudimos ver el avance de His Dark Materials (La materia oscura), la nueva adaptación del bestseller de Phillip Pullman para HBO. La plataforma de streaming sabe hacer las cosas bien y una vez más vuelve a apostar por la calidad antes que la cantidad, dejando boquiabiertos por la calidad y la profundidad que presenta la serie. Sus creadores no tuvieron reparos en reconocer que la obra de Pullman (especialmente a partir de la segunda novela) es controvertida, pero que precisamente por eso debe ser contada, ya que se trata de una obra adulta, que propone una serie de preguntas incómodas pero dirigida a un público juvenil.
