Desde sus inicios, el festival de Sitges siempre ha estado muy comprometido con la animación. El Festival Internacional de Cine Fantástico de Cataluña alberga bajo su ala una gran cantidad de géneros y estilos, no sólo fantasía y terror. Además de secciones enteras como Anima’t, no hay ningún reparo en alojar en la competición de Sección Oficial o en cualquier otra, los trabajos más memorables del año. Si eres un fan de la animación, Sitges también es para ti.
White Snake, por si se nos olvidaba que China tiene una potente animación
Siempre que decimos animación, nuestra mente viaja automáticamente al anime japonés o bien a la animación más clásica europea. Muchas veces pasamos por alto al gigante asiático y su gusto también por este género. Huyendo del estilo tradicional y decantándose por el cine en 3D, White Snake es una de esas pequeñas sorpresas que el Festival de Sitges suele esconder todos los años.
Blanca es una demonio serpiente, enviada para matar al General, quien las está dando caza para buscar el secreto de la vida eterna. El intento de asesinato no sale como debería y Blanca pierde la memoria, mientras es rescatado por un joven cazaserpientes. Poco a poco la relación entre ellos se irá estrechando, dándole motivos a Blanca para pensar que no todos los humanos merecen morir.
Generalmente, los trabajos de animación en 3D fuera de los grandes estudios (véase Pixar o Dreamworks) suelen ser… irregulares. Sin embargo, White Snake es una delicia visual. Desde los espectaculares escenarios naturales, las peleas épicas o incluso las expresiones, todo tiene un resultado notable sin buscar tampoco el fotorrealismo. Además la historia te atrapa rápidamente en su mitología y en la relación entre los dos protagonistas, sin ser excesivamente empalagosa (algo habitual en el género).
Her Blue Sky, drama, música y sensaciones
El anime es un género no siempre encaja con el espectador tipo de Sitges. El terror, el gore y la ciencia ficción no siempre cuadran bien con el drama romántico de muchos animes. Y este es el caso de Her Blue Sky.
La película explora la relación entre dos hermanas que, debido a la prematura muerte de sus padres son obligadas a crecer demasiado deprisa, cortando de raíz sus aspiraciones. Aoi desea ser bajista, enamorada de la música que le gustaba a su hermana mayor, ahora demasiado centrada en sus obligaciones del trabajo. Un día, el exnovio de la hermana, aparece en el almacén donde la joven practica… pero parece que no ha pasado ni un día desde que se vieron por última vez hace 5 años. Además, el chico parece que físicamente no puede dejar el edificio.
Her Blue Sky es un drama con tintes fantásticos que se centra en explorar el dolor de la pérdida, usando para ello la música y una animación vibrante. Los creadores de Sinfonía del corazón vuelven con una historia de personajes y música, confrontando literalmente las ilusiones juveniles con la cruda realidad.
I Lost My Body, Netflix acogiendo a la animación más indie
Después de su éxito en Cannes, I Lost My Body es una de las apuestas más originales de este festival. El francés Jérémy Clapin firma una película cargada de sentimientos, con una animación muy expresiva y una banda sonora que reemplaza magistralmente a casi todos los diálogos. El trabajo es tan fino, que en I Lost My Body conseguimos empatizar con una mano y sus emociones.
Al más puro estilo de Cosa de la Familia Addams, una mano recorre París buscando al resto de su cuerpo. Mediante flashbacks vamos conociendo a Naoufel, su dueño. Naoufel es un joven que también vive incompleto, cargado con la culpa de una tragedia y de los sueños rotos. La mano también tiene sus propios recuerdos y vivencias que se irán complementando con las del jóven cuando conozca éste a Gabrielle.
El simple hecho de que I Lost My Body consiga que empaticemos con una mano y nos enternezcan sus recuerdos ya debería ser suficiente mérito. Pero además de la aventura de la mano, Clapin nos envuelve en un romance juvenil, teñido de melancolía, de alguien incapaz de encontrar su sitio.
Weathering With You, lo nuevo de Makoto Shinkai
Desde el increíble bombazo que resultó ser Your Name (siendo la película más taquillera de la historia de Japón), todas las productoras japonesas andan buscando un nuevo diamante en bruto. Pero quién mejor que el propio autor original para traernos Weathering With You, que sigue explorando el amor adolescente con un giro fantástico.
Aunque ya la vimos en la pasada edición del SSIFF, no pudimos dejar pasar esta oportunidad. Weathering With You pone el protagonismo en Hodaka, un joven adolescente que se ha refugiado en la ciudad, buscando trabajo. Mientras se gana la vida como puede trabajando en una revista de ocultismo, Hodaka conoce a Hina, una joven que es capaz de parar la lluvia con tan sólo rezar. Entre ellos se forjará una relación que va más allá de la amistad.
Makoto Shinkai vuelve a construir una película usando una fórmula un poco parecida a Your Name. Por un lado vuelve a presentarnos un potente amor de juventud, entre adolescentes con problemas familiares. También se pone sobre la mesa un elemento fantástico que tiene una parte ligera y divertida, pero que finalmente es la causa del principal conflicto de la pareja. Weathering With You quizás es menos edulcorada que su predecesora, pero sigue siendo igual de emocionante y si te gustó la primera, esta te seguirá conquistando.