Nos adentramos en uno de los géneros más polémicos del mundo del cine, los musicales. Por todos es conocida la gran controversia que se genera ante este tipo de películas; muchos las aman, pero otro gran porcentaje, llega a odiarlas. A lo largo de la historia, hemos visto gran cantidad de ellos en la gran pantalla, pero no todos han llegado a tener éxito, es más, algunos son considerados los peores musicales jamás vistos en el mundo del cine. Hoy, repasaremos algunos de estos que triunfaron, sí, pero no de la manera que esperaban.
1. Grease 2 (1982)
Siempre se dijo que las segundas partes nunca fueron buenas; es el caso de Grease, que tras cosechar un gran éxito con su primera entrega, en 1982 llegó una innecesaria secuela, protagonizada por Michelle Pfeiffer. En esta segunda parte, además de que la historia es exactamente la misma, podemos ver cómo el personaje duro y macarra, en vez de ser el hombre, ahora es Stephanie (Michelle Pfeiffer) mientras que el chico Michael (Maxwell Cauldfield) será el nuevo y tímido del instituto. Sin llegar al nivel de la primera película, podemos decir que se podría prescindir de ella en el mundo del cine, siendo un plagio desde el primer minuto y con originalidad nula.
2. Burlesque (2010)
Christina Aguilera debutaba por primera vez como actriz en la gran pantalla; con un argumento simple y previsible donde una chica que trabaja en un bar de carretera quiere llegar a ser cantante y se traslada a Los Ángeles. No podemos negar la grandeza de los números musicales ni la magnífica actuación de Christina. A pesar de esto, no deja de ser una historia mil veces repetida, sin ninguna novedad, que llegó a tener éxito, en gran parte, por los fans de la cantante neoyorkina.
3. El fantasma de la ópera (2004)
La obra de Andrew Lloyd Webber lleva más de 30 años triunfando en Broadway, por eso mismo, Joel Schumacher decidió hacer su adaptación cinematográfica. Se esperaba que fuera tan exitosa como su representación teatral, pero no, incluso llegó a ser odiada. ¿Por qué? Se cree que todo tiene que ver con el director, Joel, ya que como muchos decían, era un director todoterreno, el cual se llevó por delante todo el dramatismo y el encanto que podíamos disfrutar en la obra de teatro.
4. Sweeny Todd: El barbero diabólico de la calle Fleet (2007)
Basada en otro famoso musical de Broadway y considerada uno de los mejores hechos hasta la fecha, el barbero diabólico narra la historia de Benjamin Barker, conocido como Sweeney Todd (Johnny Depp), un personaje un tanto siniestro que, como dice el título, es barbero en Londres y cuya navaja es bastante peligrosa. Para la sorpresa de todos, hay actuaciones impecables de la mano de Alan Rickman y Helena Bonham Carter pero, aún así, muchos tachan a este musical de muy predecible, añadiendo que sus canciones no aportan nada al argumento de la película, y concluyendo con que es demasiado sangrienta, un carácter poco habitual para un musical.
5. Hairspray (2007)
Este musical dirigido por Adam Shankman (Un canguro superduro) y basado en la película con el mismo nombre de John Waters, fue una completa decepción, sobre todo para los fans de este último: «No sólo echó por tierra todo el trabajo que hizo Waters sino también acabó con la crítica social.» A pesar de las críticas, el éxito llegó pronto, con tres nominaciones a los Globos de Oro y dos a los premios BAFTA, además de contar con la aprobación de un gran porcentaje de los espectadores que la disfrutaron. ¿De qué lado te pones?
