El 18 de enero en cines
El griego Yorgos Lanthimos es todo un director de culto entre los círculos cinéfilos. Aunque ya era conocido por su trabajo en Langosta y Canino (a pesar de las bromas que se hacen a su costa en la Muestra Syfy todos los años), llamó la atención de la crítica después de ganar el Premio al Mejor Guion en el Festival de Cannes por El sacrificio de un ciervo sagrado.
Vuelve Yorgos con La favorita, escrita por Deborah Davis y Tony McNamara, un trabajo lleno de emociones intensas y puñaladas por la espalda, culminado con unas actuaciones protagonistas sobresalientes.
Durante los primeros años de 1700 y los últimos del reinado de la reina Anne de Inglaterra, la soberana era una mujer sobrepasada por sus ataques de gota y consumida por la pena de haber perdido a todos sus hijos y su marido. Debido al agotamiento y enfermedad, la mayor parte del tiempo el reino era dirigido por su favorita, Sarah Churchill, la Duquesa de Marlborough. Abigail Hill, una prima lejana de ésta, desposeída de toda riqueza, llega al palacio con la esperanza de poder aprovechar su parentesco para no terminar en la calle.
Ambición y poder
Abigail va abriéndose paso con astucia desde lo más bajo del castillo hasta que un día descubre que la relación entre la reina Anne y Sarah Churchill era algo más que fraternal. La fragilidad física y mental de la reina así como la dureza de su favorita le dará pie a la recién llegada para desatar su ambición y hacerse paso en la corte, incluso por encima del bienestar de la nación.
La favorita, un fabuloso retrato de época
Nada más empezar a ver La favorita, con sus 121 minutos de duración, salta a la vista el aspecto clásico y cuidado de la cinta. Al igual que una novela de época, el guion que firman Deborah Davis y Tony McNamara está dividido en capítulos donde los protagonistas absolutos son los largos y afilados diálogos. La película retrata a la perfección la vida en palacio a principios del Siglo XIX. El tedio, la rutina, las intrigas e incluso la suciedad característica de la época están presentes de una manera casi física de una manera magistral.
La firma de Lanthimos
Lanthimos también hace un uso muy creativo de la cámara para representar el ambiente opresivo y rancio de los pasillos del palacio. En especial llaman la atención el extraño uso de ojos de pez y de planos excesivamente bajos. El director griego no duda en dar su toque personas en la primera película en la que no escribe también el guion.
Un reparto soberbio
Más allá de la dirección de arte, Lanthimos dirige a todo el reparto de forma magistral. En especial el trío protagonista da lo mejor de sí llenando la cinta de diálogos agudos y respuestas mordaces. Ciertamente, este tipo de conversaciones pueden llegar a sacar una sonrisa pero el tono de la película está más cerca del drama que de la comedia (a pesar de su gran cantidad de nominaciones en los Globos de Oro).
Diálogos agudos y respuestas mordaces
Rachel Weisz ya ha demostrado varias veces su talento dramático y Emma Stone queda muy bien en un papel que tiene que presentar una cara inocente y amable y otra manipuladora y codiciosa. Pero si una actriz destaca de las tres esa es Olivia Colman en el papel de la reina Anne, con unos discursos soberbios y una aproximación humana a una de las reinas más dramáticas de la historia de Inglaterra.
La favorita es una película seria y reposada, que no se hace pesada gracias a lo inteligente de sus diálogos y las grandes actuaciones. El desenlace final de la película puede dejarnos un tanto fríos pero a pesar de ello es de las películas más accesibles de Yorgos Lanthimos y es ideal para amantes de las novelas históricas.
Dirección: Yorgos Lanthimos.
Reparto: Olivia Colman, Emma Stone, Rachel Weisz, Nicholas Hoult, Joe Alwyn, James Smith.
Duración: 121 minutos.
Fecha de estreno en España: 18 de Enero de 2018.