«DESMONTANDO UN ELEFANTE», la ópera prima de Aitor Echeverría, ha finalizado su rodaje en Barcelona. Se trata de un íntimo y emocionante retrato familiar protagonizado por las ganadoras del Goya Emma Suárez y Natalia de Molina, a las que les acompañan Darío Grandinetti y Alba Guilera, entre otros.
La película nos presenta la historia de una familia atrapada en una cotidianidad enfermiza y con el tabú de la adicción como protagonista: ese “elefante en la habitación” que nadie quiere ver. Emma Suárez y Natalia de Molina son madre e hija, con un fuerte vínculo que las une y, al mismo tiempo, las separa. El film ahonda en esos lazos invisibles que nos unen a nuestros seres queridos, y en esas fidelidades silenciosas que a veces debemos romper para poder avanzar.
El director y guionista Aitor Echeverría debuta en el largometraje de ficción tras su amplia trayectoria como Director de Fotografía (“El nieto”, “María y los demás”, “El Inocente” o “Galgos”) y una carrera como director de cortometrajes premiados en festivales nacionales e internacionales entre los que destacan «Aprop» y “Morir cada día”.
El guion de «DESMONTANDO UN ELEFANTE», escrito por Aitor Echeverría y Pep Garrido, fue uno de los tres finalistas del Premio Guion Julio Alejandro 2019 otorgado por SGAE. El director reconoce que: “Desde que empecé a imaginar este guion hasta ahora ha pasado una década. Al mirar hacia atrás, agradezco que haya sido así. Es un relato que merecía ser pensado, macerado con el paso de los años”.
En palabras de Aitor Echeverría, “»DESMONTANDO UN ELEFANTE» es una película de reconstrucción. A pesar de la crudeza de las situaciones, sostiene la idea de que afrontar los problemas no es fácil, pero es siempre mejor que evitarlos. De cómo la vida sigue su curso con, sin y a pesar de nosotros”.
Sinopsis de la película
Marga (Emma Suárez), una arquitecta de éxito, regresa a casa tras haber pasado dos meses internada en un centro de rehabilitación por un problema de adicción con el que su familia convivió en silencio durante años.
Tras su llegada, Marga intentará rehacer su vida anterior mientras su hija menor Blanca (Natalia de Molina), verá cómo la atención que vuelca sobre su madre afecta tanto a sus relaciones como a su sueño de ser bailarina profesional.
Un año después, «el elefante» sigue tan enorme como siempre. Aunque por lo menos, ahora, todos pueden verlo.